viernes, 28 de octubre de 2022

Revisión de cajas refugio para murciélagos en Amurrio y detección de murciélago rabudo mediante la grabación de ultrasonidos

 

Midiendo el antebrazo de un nóctulo pequeño. Foto Enrique Arberas.

El pasado sábado 22 de octubre revisamos las 12 cajas refugio para murciélagos que tenemos colocadas y repartidas entre dos zonas de Amurrio, el Reformatorio y el parque. Excepto una de ellas que se colgó hace aproximadamente cinco años en un plátano del parque municipal, el resto las instalamos entre septiembre del año pasado y primavera de este. Todas las cajas refugios han sido adquiridas gracias a una ayuda económica y a la colaboración del Departamento de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Amurrio.

Caja refugio ocupada por nóctulos pequeños. Foto Enrique Arberas.

Descolgando cajas refugio para limpiarlas.Foto Enrique Arberas.

Uno de los problemas a los que se enfrentan las especies de murciélagos que utilizan los árboles para refugiarse es la falta de fisuras, huecos bajo la corteza, agujeros de pícidos y un sinfín de oquedades que proporcionan los ejemplares añosos. Las talas abusivas causadas a nuestro arbolado durante siglos para la extracción de leña o piezas para la construcción de casas, unido a la actual explotación forestal basada en especies de turno corto como eucaliptos o pinos de Monterey, ha generado un paisaje con escasa presencia de árboles viejos y, por tanto, con una ausencia destacada de toda fauna asociada a ellos como pueden ser los murciélagos arborícolas.


Nido de chochín y párido

A finales del año pasado descubrimos en una caja del parque seis nóctulos pequeños (Nyctalus leisleri) y como la caja está abierta por la parte interior también sabíamos que este año estaba ocupada, en esta ocasión eran solamente tres los ejemplares. Como señalábamos el año pasado en este mismo blog, los nóctulos pequeños capturados en el País Vasco indican que existe una población sedentaria de machos que ocupa la región durante todo el año y que sólo a partir de finales de verano, momento de la época reproductora, hacen presencia las hembras procedentes de sus lugares de cría situados en Europa. Así que desde un primer momento consideramos que se trataba de un harem que se forma en otoño para la reproducción de la especie.

Zoropsis spinimanus. Foto Enrique Arberas

Joseba y Miguel fotografiando la araña. Foto Enrique Arberas.

El resto de las cajas no fueron ocupada por ningún murciélago, ni tampoco encontramos señales que indicasen su ocupación. Ha sido otro tipo de fauna la que ha ocupado las cajas: hormigas, arañas, avispones europeos, avispas asiáticas y paseriformes que han construido su nido dentro de ellas, seguramente un chochín y alguna especie de párido.

Avispón europeo

Avispón europeo

Unos resultados pobres, que cabía esperar dado el poco tiempo que llevan colocadas. Aunque la revisión también ha servido para mejorar y afianzar la técnica para ascender a revisar las cajas y manipularlas de manera segura.

Revisando las cajas refugio con pertiga y endoscopio

La revisión de las cajas refugio también nos ha llevado a detectar la presencia del murciélago rabudo (Tadarida teniotis) sobre el parque de Amurrio. Para comprobar que los nóctulos que ocupaban la caja del parque de Amurrio eran nóctulos pequeños y no medianos (Nyctalus noctula) colocamos un par de noches un grabador de ultrasonidos junto a la caja. Efectivamente, interpretamos los registros sonoros de nóctulo como pertenecientes a nóctulo pequeño y no al mediano, aunque la sorpresa fue la grabación de pulsos de murciélago rabudo en varios momentos de la noche de manera distintiva, acompañados de los típicos armónicos de la especie.

Murciélago rabudo. Foto extraída de la web Vertebrados ibéricos.

El murciélago rabudo es uno de los murciélagos más grandes de Europa, con una envergadura que puede alcanzar los 45 cms. Las grabaciones de ultrasonidos que hemos realizado este mismo año nos indican que habitan de forma habitual la Sierra Salvada y seguramente el Macizo del Gorbea, al menos el área de las canteras de Murua. Esta especie se refugia en roquedos y fisuras de puentes y otras construcciones humanas, y cazan sobre núcleos urbanos y espacios abiertos, desplazándose para ello grandes distancias. Este puede ser el caso de los murciélagos rabudos detectados en Amurrio, que procedan de la Sierra Salvada.