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viernes, 27 de junio de 2025

El dimorfismo estacional de la mariposa levana (Araschnia levana)

 

El dimorfismo estacional de esta mariposa, que se presenta en una coloración diferente según pertenezca a la primera  o a la segunda generación, llegó a confundir al propio Carl von Linneo al incluirla en su Systema Naturae (1758) como dos especies diferentes: a la forma de primavera le dio el nombre Papilio levana  y a la forma de verano Papilio prorsa. En 1816 Jakob Húbner mantuvo el mismo error de creer que eran dos especies, pero las incluyó en la familia Nymphalidae y en el género Araschnia. Solo años más tarde y tras criar orugas de diferentes generaciones se descubriría que en realidad son una única especie.

 

Araschnia levana en Menoio. Foto Gustavo Abascal

Como puede observarse en las fotografías, la generación de primavera es de color naranja con dibujos negros y ribetes blancos mientras que la de verano tiene alas negras con bandas blancas y finas rayas naranjas. Al parecer, es principalmente la cantidad de horas de luz a las que están expuestas las orugas las que determinan un patrón de coloración u otro, si son 16 horas o más presentará una forma de verano y si son menos será la de primavera. Y según las condiciones de temperatura e insolación al final de verano puede aparecer una tercera generación de coloración intermedia entre las dos anteriores, algo que se está haciendo más frecuente con el cambio climático.

 


La fotografía que encabeza esta entrada está tomada en Menoio y se trata de un ejemplar de segunda generación; la otra fotografía es de un ejemplar de primera generación localizado en Luyando. Estas observaciones son hoy corrientes, pero esta mariposa no fue detectada en la península Ibérica hasta finales de los años sesenta del siglo pasado, precisamente fue Gipuzkoa el territorio donde fue observada por primera vez, luego se fue extendiendo a Navarra, Girona o Bizkaia. Su distribución europea hasta ese momento se localizaba principalmente en Centroeuropa.

 

Gráfico extraído del Estado del clima en Euskadi. 2025. Euskalmet, Ihobe y Gobierno Vasco.

La hipótesis más aceptada de la expansión general de este lepidóptero es la del cambio climático. Según el Estado del clima en Euskadi (informe de 2025, elaborado por Euskalmet, Ihobe y Gobierno Vasco) la temperatura en el País Vasco ha subido 0,3 grados por década desde 1970 y los años 2022 y 2023 fueron los más cálidos desde 1950.  Así que los desplazamientos de fauna y extinciones locales van a ser cada vez más frecuentes por el aumento de las temperaturas, hecho que venimos constatando en este blog dando cuenta, por ejemplo, de la aparición de aves de distribución mediterránea que se reproducen en nuestra comarca como la curruca cabecinegra, la curruca tomillera o la oropéndola, a la vez que otras como son las aves de montaña están disminuyendo o se han extinguido, caso del roquero rojo o el acentor alpino.

 

Parnassius apollo en Salvada. Foto Gustavo Abascal. Mariposa de montaña desaparecida ya de varios macizos montañosos de Álava.

Pone los pelos de punta imaginar cómo afectará a nuestra fauna y ecosistemas el ascenso de los más de 4ºC previstos para finales de siglo si no hacemos nada para impedirlo, aunque no parece asustarnos lo suficiente porque seguimos emitiendo más y más gases de efecto invernadero, explotando recursos, contaminando, extinguiendo especies… seguimos en rumbo de colisión cada vez más rápido.

 

sábado, 7 de septiembre de 2024

Curruca tomillera en Unza

 

Curruca tomillera en Unza

 A mediados de mayo recorrí todo el cantil que va desde el pueblo de Unzá hasta el Pico del Fraile para observar las aves de montaña que crían aquí: bisbita alpino, chova piquigualda, escribano montesino, vencejo real o, con suerte, roquero rojo. Nos encontramos en un área con alta diversidad de especies de aves gracias a la cual ha sido declarada Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y a medida que iba caminando pude ver algunas de las aves buscadas como el bisbita alpino o el vencejo real, pero también fueron apareciendo muchas otras como chovas piquirrojas, halcones peregrinos, alimoches, alondras, pardillos, totovías o bisbitas arbóreos.

Buitre leonado en el cantil

La sorpresa surgió cuando regresaba, en lo alto de un majuelo cantaba un macho de curruca tomillera (Sylvia conspicillata). El año anterior ya habían sido detectados ejemplares de esta especie en este mismo lugar y Juanma Pérez de Ana llegó a confirmar su reproducción con la fotografía de pollos volanderos.

Vencejo real en el Salto del Nervión
Alondra

Hasta el año pasado no se tenía constancia de ninguna cita de esta especie en la Sierra Salvada. Si atendemos al área de distribución peninsular observamos que, a excepción de la fachada atlántica donde se encuentra ausente, cría de manera amplia por toda ella presentando las densidades más altas en los mosaicos de pastizal matorral semiáridos. Su hábitat son los paisajes desarbolados, secos con arbustos dispersos y de escasa entidad ¿Qué hace la curruca tomillera criando en Unzá?

Totovía en Unza

No fue Unzá el único punto del País Vasco donde fueron detectados ejemplares de curruca tomillera en 2023; en Ornitho.eus se constata igualmente la reproducción de esta especie también en Galdames. Uno se pregunta si no hay más lugares del País Vasco donde esté criando y haya pasado desapercibida pues al fin y al cabo sitios como Unza son muy transitados y su detección más probable.

Bisbita arbóreo
Bisbita alpino

Ya en 2015 los investigadores G. Assandri y M.G. Morganti afirmaron en un artículo (Is the Spectacled Warbler Sylvia conspicillata expanding northward because of climate warming?) que la población de currucas tomilleras en Europa estaba experimentando una expansión hacia el norte en respuesta al cambio climático, aunque reconocían que el conjunto de datos era pequeño y que podrían estar interviniendo otros factores como las fluctuaciones climáticas.

Curruca tomillera en Unzá

Efectivamente es necesario trabajar con un mayor número de años y tener en cuenta otros factores que pudieran explicar esta expansión hacia el norte de un ave termófila como la curruca tomillera, antes de atribuirla directamente al calentamiento global. Pero, la excursión la había emprendido para buscar aves de montaña ¿Dónde están algunas de ellas como el roquero rojo o el acentor alpino que antes veía sobre lo alto de los farallones de Sierra Salvada?

miércoles, 24 de enero de 2024

Dr Jekyll & Mr Hyde

Arabako Diputatu Nagusia pozez ageri zen duela aste batzuk Forondako aireportuan izandako bidaiari errekorragatik. 2023 urtean Forondak 291.777 bidaiari jaso zituen, eta Diputatu Nagusiak “500.000-raino iristea proposatzen zuen eta aireportua handitzeaz egin zuen berba.

https://www.europapress.es/euskadi/noticia-aeropuerto-alaves-foronda-bate-record-historico-pasajeros-291777-viajeros-2023-20231212123036.html

Urteterdi lehenago, 2022ko ekainean, Arabako Diputatu Nagusiak Arabako gizarteari Klima Araba 2050 Estrategia Klima Araba 2050 Estrategia aurkeztu zion, Aldundiko Gobernu Kontseiluak onartua. Une horretan argitaratu zen prensa-oharran ageri zenez, Klima Arabak lurraldearen eraldaketa proposatzen zuen, karbono kontsumo urriko eredu sozioekonomiko eta energetiko batea egokitzeko.

Klima Araba 2050 Estrategiak 8 helburu ditu. Bigarrenak “Isuri urriko garraio eta mugikortasuna du izenburu. Bertan garraio publikoa hobetzea, bizikletaren erabilpena erraztea, mugikortasun sostenigarrirako egitasmoak egitea eta burdin bidezko garraioa bultzatzea aipatzen dira.

Forondako hegaldien kopurua bikoiztu ta aireportuaren handitzeko asmoak, Aldundiak aldaketa klimatikoaren kontrako bere estrategian esaten duenarekin ez du bategiten. Are gehiago, kontraesan argia da

Arnastu eta putzegin, biak batera ezin.



El diputado general de Álava se felicitaba hace unas semanas del récord de pasajeros en el aeropuerto de Foronda. El año 2023 Foronda acogió 291.777 pasajeros y el diputado general planteaba “ir a por los 500.000” y hablaba de ampliar el aeropuerto.

https://www.europapress.es/euskadi/noticia-aeropuerto-alaves-foronda-bate-record-historico-pasajeros-291777-viajeros-2023-20231212123036.html

Año y medio antes, en junio de 2022 el diputado general de Álava presentaba a la sociedad alavesa la Estrategia Klima Araba 2050, que había sido aprobado por el consejo de Gobierno de la Diputación. Según decía la nota de prensa que se publicó en aquel momento “Klima Araba propone la transformación del territorio para adaptarse a un modelo socioeconómico y energético bajo en carbono

La estrategia Klima Araba 2050 tiene 8 metas. La meta 2 se llama “Transporte y movilidad de bajas emisiones“ que habla de mejorar el transporte público, favorecer el uso de la bici, redactar planes de movilidad sostenible o potenciar el transporte ferroviario.

Pensar en duplicar, o casi, el tráfico aéreo del aeropuerto de Foronda y ampliar el aeropuerto para que haya más viajes es contradictorio con lo que la Diputación plantea en su estrategia de lucha contra el cambio climático.

Repicar y estar en misa es imposible.  



miércoles, 13 de diciembre de 2023

Emisiones de Gases de Efecto Invernadero. Los alaveses y alavesas somos los que más emitimos per cápita de Euskadi

 

El pasado mes de septiembre el Gobierno vasco ha publicado el “Inventario de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero de Euskadi” que puede consultarse en este enlace

Según este documento los alaveses y alavesas somos los que más Gases de Efecto Invernadero emitimos per cápita de Euskadi.

El documento analiza las emisiones de los Gases de Efecto Invernadero-GEIs (dióxido de Carbono CO2, metano CH4, óxido nitroso N2O y gases fluorados HFCs, PFCs y SF6) en los distintos sectores: industria energética, industria manufacturera y transformadora, sector residencial, sector servicios, transporte, sector primario y gestión de residuos.

El cálculo se realiza mediante una metodología estandarizada establecida por la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC), que a su vez se basan en las Guías Metodológicas establecidas por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC)

Si bien Araba por su menor población y actividad contribuye con el 18% de las emisiones de GEIS de Euskadi, frente al 30% de Gipuzkoa y el 52% de Bizkaia, (pincha en las imágenes para verlas más grandes)

Araba es el territorio donde menos han disminuido las emisiones de GEIs desde el año 2005, tal como se refleja en la siguiente gráfica (línea roja corresponde a Araba)

El año 2005 es el año de referencia para valorar el cumplimiento de los compromisos adquiridos en el Acuerdo de Paris que establece unas reducciones anuales vinculantes de las emisiones de gases de efecto Invernadero por parte de los Estados miembros para 2030. El compromiso para España es de una reducción del 37,5% respecto al año 2005.

Si analizamos las emisiones de CO2 los alaveses somos los que más emitimos per cápita de Euskadi, tal como se refleja en este gráfico. Emitimos 9,3 toneladas de CO2 por persona y año, frente 8 en Bizkaia y 7,4 en Gipuzkoa:


Si nos fijamos solo en los sectores difusos, es decir aquellos que no están reguladas por la normativa de comercio de emisiones, fundamentalmente el sector transporte (sin contabilizar las emisiones del transporte aéreo internacional), el sector residencial y servicios, residuos y a las instalaciones industriales y energéticas de tamaño medio y bajo, no afectadas por la citada normativa, las emisiones per cápita en Araba se disparan respecto a Bizkaia y Gipuzkoa. En Araba alcanzamos las 6,9 toneladas de CO2 por habitante y año, frente a las 3,6 de Bizkaia y las 5,1 de Gipuzkoa.



Analizando las emisiones por sectores en Araba vemos como el sector transporte es el sector que más contribuye a las emisiones totales de GEIs:

 


Y es el sector que mantiene e incluso experimenta un aumento de emisiones a lo largo de los años alcanzado en 2021 casi 1,5 millones de toneladas de CO2



A escala de Euskadi el sector del transporte es el único que ha aumentado sus emisiones de GEIs desde el año de referencia 2005. Sin embargo los sectores industriales, el energético y la agricultura han disminuido sus emisiones tal como se refleja en esta gráfica.

En términos absolutos el sector transporte es el que más GEIs emite en Euskadi, superando incluso al sector energético.



Con estos datos parece lógico pensar que el sector transporte, en Araba en particular, merece un esfuerzo adicional para la reducción de emisiones. Dicho eufemísticamente por ejemplo en Araba hay margen de mejora para el servicio de transporte público en autobús. Mientras tanto seguimos gastando millones de euros en nuevas carreteras.

El impulso al transporte público en detrimento del coche particular para la movilidad de las personas, uso de la bici o el caminar en entornos urbanos, fomento de uso del tren, diseño urbano compacto y complejo, planes de transporte en centros de trabajo con un número elevado de trabajadores, compartir coche, teletrabajo, fomento de carriles bici, no facilitar la presencia del coche particular en los centros urbanos, fomento del comercio local frente al cibercomercio, etc., son recetas archiconocidas.

Este pasado mes de noviembre la temperatura media del planeta superó los 2ºC de calentamiento global de manera puntual y por primera vez respecto a la era preindustrial (1850-1900) como se ve en la imagen de debajo, según informó el Servicio Europeo de cambio Climático Europeo Copernicus.

Recordemos que el acuerdo de Paris tiene como objetivo evitar que el incremento de la temperatura media global del planeta supere los 2ºC respecto a los niveles preindustriales y busca, además, promover esfuerzos adicionales que hagan posible que el calentamiento global no supere los 1,5ºC.

 



miércoles, 2 de agosto de 2023

Cientos de pinos silvestres de la Cuadrilla de Ayala se secan por la sequía de 2022

 

Estremece ver tantos pinos silvestres (Pinus sylvestris) secos al sur de la Cuadrilla de Ayala, fundamentalmente concentrados en la zona de la sopeña. No se trata de los efectos de una plaga como fue el caso del hongo Mycrosphaerella dearnessii, también conocido como banda marrón, que afectó a los pinos de Monterrey en 2018, esta vez ha sido la combinación de la escasa precipitación y de las altas temperaturas registradas a lo largo de 2022 la que ha acabado matando los árboles.

Pinos silvestres secos en el pantano de Maroño

En abril de este mismo año publicamos una entrada en este blog sobre las altas temperaturas registradas a lo largo de 2022 que le convertían en el año más cálido desde que se tenían registros, y a estas altas temperaturas se sumó una precipitación por debajo de los 800 mm, lo que provocó, entre otros efectos que mencionamos en aquel texto, la muerte de cientos de pinos silvestres en nuestra comarca. Recorriendo la zona podemos observar esos rodales de color marrón que indican la muerte de los pinos.

Pinos silvestres secos. Entorno ermita de Extaurren

El pino silvestre se distribuye desde Manchuria a Escocia y de Sierra Nevada a Escandinavia, es el árbol de área más extensa de Europa. Dentro de la península Ibérica comprende tres núcleos principales: Pirenaico, Central e Ibérico con un apéndice meridional y otro septentrional que llega a los montes vasco-cantábricos. Concretamente en el País Vasco ocupa una extensión de unas 17.000 Ha. Por sus requerimientos climáticos se considera una especie típica del piso montano luminoso, adaptada al clima frío o templado frío.

Distribución del pinos silvestre en el País Vasco


En nuestra comarca el pino silvestre crece en la zona meridional de suelos calizos, en el piso montano, formando bosques mixtos con quejigos (Quercus faginea). Es el paisaje de los pueblos de la sopeña ayalesa como Salmantón o Menoio y sus cimas de Babio, Peregaña o Eskoritas. Es posible que el pino silvestre haya ido aumentando su superficie en las últimas décadas, es una especie pionera, de crecimiento rápido y amante de la luz, por lo que se considera una especie colonizadora. Si consultamos las fotos aéreas desde 1932 observamos que el pino silvestre ha ido ocupando en nuestra comarca aquellos espacios abiertos que se habían formado por el secular aprovechamiento del arbolado, por la creación de dehesas para el ganado o por el abandono de terrenos dedicados al cultivo de cereal situados en lugares de baja calidad.

Pinos silvestres secos. Entorno ermita de Etxaurren

El abandono de las prácticas tradicionales de explotación del medio y una precipitación media superior a los 1000 mm anuales han favorecido hasta la fecha la expansión de esta especie de pino en la Comarca Cantábrica Alavesa, pero el cambio climático le está haciendo retroceder. Los lugares donde se han secado los pinos silvestres son principalmente aquellos con poco suelo donde las raíces no pueden penetrar en busca de agua, en laderas y cumbreras. Los quejigos con los que comparten el bosque sufrieron el año pasado las mismas condiciones climáticas, pero poseen una estrategia para sobrevivir en situaciones de sequía, se trata del secado prematuro de las hojas que evita seguir manteniendo activo el sistema foliar.

Con el fin de evitar una fuerte depreciación de la madera y posibles plagas de insectos perforadores que pudieran afectar a los pies sanos, la Administración ha autorizado el aprovechamiento extraordinario de las masas de pino afectadas por la sequía en los pueblos de Agiñiga, Menoio, Maroño, Salmantón, Añes, Erbi, Lejarzo, Lujo, Madaria, Ozeka y Sojo. En total suman 341 hectáreas, aunque este dato solo es aproximativo, está por ver la cifra real.

Pinos silvestres secos en monte Babio

Obviamente la sequía del año pasado no sólo ha afectado a los pinos silvestres de nuestra comarca. Si nos desplazamos a los valles vecinos, a Kuartango, Zigoitia o Valdegobía, veremos más pinos silvestres secos y en las Sierras de Badaia o Arrato, además de pinos, veremos que son las encinas las que también se han secado a cientos. El área afectada es mucho mayor que los lugares señalados aquí, sería interesante realizar un estudio sobre cuantas hectáreas de arbolado se vieron afectadas por la sequía y hacernos así una idea de la magnitud de la muerte del arbolado.



Como puede verse, el cambio climático se ha convertido ya en una importante variable para explicar la dinámica de nuestro paisaje. A medida que avance el siglo y sigan aumentando las temperaturas la sequía edáfica durará más meses limitando la disponibilidad de agua en el suelo. Las raíces de los árboles van a tener más difícil llegar a la indispensable agua y sobrevivir. Así que la superficie de pinos silvestres afectados por la falta de agua y aumento de las temperaturas es probable que siga creciendo, el número de pinos secos aumentará.


Es una incógnita cómo reaccionará la vegetación que actualmente puebla nuestro territorio ante los previstos cambios de condiciones climáticas en un corto periodo de tiempo. Los estudios teóricos que analizan la posible dinámica de la vegetación, como por ejemplo el “Análisis de riesgo climático de los hábitats terrestres de Euskadi” elaborado por la Sociedad Pública del Gobierno Vasco IHOBE” y que pueden consultarse en el visor de información ambiental geoeuskadi (https://www.geo.euskadi.eus/geobisorea), nos dicen que a finales de siglo XXI la vegetación natural de nuestra comarca cambiará de manera sustancial. Por ejemplo, los hayedos solo sobrevivirían en zonas elevadas del macizo del Gorbea.

Pinos silvestres secos. Ozeka

Y seguramente la encina ocupe el espacio dejado por pinos silvestres y quejigos que no hayan podido adaptarse. La encina se va a ver favorecida no sólo por el abandono del campo, sino también por el calentamiento global.

También las especies exóticas utilizadas para plantaciones forestales y desarrollar una silvicultura intensiva como por ejemplo el pino insignis o el abeto Douglas se verán afectadas, lo que abre un reto para el futuro.

 

sábado, 1 de abril de 2023

2022, el año más cálido desde que se tienen registros

 

Desde que en enero de 2012 comenzó la andadura de este blog hemos hablado en numerosas ocasiones del cambio climático, unas veces para mostrar que los datos registrados en las estaciones meteorológicas de Euskalmet y Aemet situadas en nuestra comarca apuntan también a un aumento de las temperaturas y a un descenso del régimen de precipitaciones anuales desde que se tienen registros, otras veces para explicar cómo estas alteraciones están afectando a nuestro medio natural: a las especies de fauna y flora, al régimen hídrico de los ríos o a las explotaciones ganaderas. El año 2022 ha sido calificado como el más cálido de las series históricas, y también como un año muy seco desde el punto de vista de la pluviometría, por esta razón hemos creído conveniente publicar una entrada en el blog con los datos concretos del año pasado en nuestra comarca, especialmente sobre las precipitaciones, y acompañarlos con unas reflexiones sobre la tendencia de estos dos elementos del clima a lo largo del siglo.

Pinos silvestres secos en el entorno de Etxaurren

Euskalmet, la Agencia Vasca de Meteorología, emitió un comunicado a principios de 2023 en el que calificaba el año 2022 como el más cálido de las series históricas, con un valor de temperatura media en Euskadi que alcanzaba los 1,8 °C por encima del promedio normal. Este comportamiento cálido había comenzado en mayo y alcanzado su punto máximo en otoño y, especialmente, en octubre cuando presentó una anomalía positiva histórica de 4ºC, la más alta observada. Según los datos de Euskalmet, las temperaturas medias del 2022 llegaron a rondar los 16-17 °C en el litoral y los 14-15 °C en los valles interiores de Bizkaia y Gipuzkoa, mientras que en la Llanada Alavesa se situaron en torno a los 13 °C, valores todos ellos claramente por encima del promedio del periodo normal 1981-2010.

Pozo en Kobata 2022.

Por otra parte, Aemet, la Agencia Estatal de Meteorología, consideró igualmente el año 2022 como el más cálido desde el comienzo de la serie en 1961 con una temperatura media sobre la España peninsular de 15,4 °C, 1,7 °C por encima de la media del periodo de referencia 1981-2010.

Las temperaturas máximas se registraron en el episodio histórico de calor entre los días 11 y 18 de julio cuando los termómetros llegaron a alcanzar 43’6º C en la estación de Gardea, 42’9º C en Saratxo, 42’4º C en Orozko y 43º C en Amurrio. Y eso que las 16 heladas que cayeron en enero (una de ellas bajó hasta los -6ºC) parecían anunciar un año frío.

Temperatura media anual Amurrio (1956-2015)


Vayamos ahora a los datos sobre la precipitación. Euskalmet calificó 2022 como un año muy seco en general para todo el País Vasco. Dentro de este territorio, hubo áreas como el litoral oriental donde se registraron cantidades de lluvia similares a la media, mientras que en otras como la Llanada Alavesa el número de litros fue inusualmente bajo para los valores de media por lo que se consideró el año como extremadamente seco en dicha comarca, el más seco desde que se tienen registros. Los valores más altos de precipitación, como es habitual, se registraron en el nordeste de Gipuzkoa (Eskas 2237 l/m²; Añarbe 1655 l/m²), mientras que los más bajos correspondieron a puntos del sur de Álava (Moreda 215 l/m²), y con valores intermedios en el resto (Arrasate 809 l/m²; Derio 796 l/m²).

El informe de Aemet apuntaba en la misma línea: la precipitación acumulada en 2022 fue inferior al valor normal en prácticamente toda la península, pero en determinados puntos de la cornisa cantábrica y sur del País Vasco fue inferior al 75%.




La estación meteorológica de Amurrio recogió 784 litros durante 2022, una cifra bastante baja para lo que suele ser lo habitual en esta localidad. La estación meteorológica de Amurrio (perteneciente a la Agencia Estatal de Meteorología en Euskadi) lleva registrando datos de manera continua desde mayo de 1955, la tercera estación más antigua de Euskadi con registro continuo de datos por detrás de Igeldo (1928) y Sondika (1947). Hay que reconocer este esfuerzo primeramente a Pedro Albizua y a Fernando Arregui, y a partir de 2016 a José Luis Albizua que tomó el relevo de la toma de datos de esta estación y a quien le agradecemos los datos que nos ha aportado para esta entrada en el blog.

Litros recogidos en Amurrio durante 2022

A continuación, mostramos una tabla con la cantidad de litros acumulados por años en Amurrio desde 1956 donde se aprecia que el año 2022, aun no siendo el más seco desde que se tienen registros, se encuentra entre los cinco años con datos inferiores a los 800 litros. En 2022 sólo tres meses llovió por encima de los 100 litros, enero con 110 l, abril con 238 l y noviembre con 109 l, siendo el 29 de abril el día más lluvioso del año cuando cayeron 119 litros. Mayo y octubre, que suelen ser meses lluviosos, únicamente se recogieron 9,2 l y 4,9 l respectivamente , aunque el mes más seco fue julio con 3,3 l.

Precipitación anual Amurrio (1956-2022)


Fueron muchos los efectos adversos de esta combinación de calor extremo y sequía en la Comarca Cantábrico Alavesa. En una entrada en este mismo blog que realizamos en julio del año pasado sobre la mariposa Parnassius apollo comparábamos la sequedad de los pastos con los paisajes castellanos de cereal cosechados y mostrábamos fotos con tramos del río Nervión completamente secos. Hacia el mes de julio fue evidente el secado prematuro de quejigos en zonas de suelo escaso, estrategia de esta especie para soslayar la sequedad del suelo, y ya entrado el otoño se produjo la muerte de numerosos árboles y especialmente pinos silvestres. Los ganaderos sufrieron especialmente la sequía y tuvieron que aportar alimento al ganado en régimen extensivo; al igual que los apicultores que vieron con impotencia cómo se morían las colmenas ya que la falta de humedad provocó una disminución de néctar disponible para muchas de las especies de flora usadas por los polinizadores.

Rio Nervión a su paso por Orduña. 2022
Es cierto que son datos referidos a un solo año y, además, aún se discute si los 150 millones de toneladas de vapor de agua lanzadas a la atmósfera por la erupción del volcán submarino Hunga Tonga el 15 de enero de 2022 fueron la causa de las elevadas temperaturas que se registraron en Europa y otras partes del mundo ese año.

Erupción del volcan Hunga Tonga

Pero no nos engañemos, todos los escenarios sobre el cambio climático apuntan en la misma dirección. Por ejemplo, la Guía de escenarios regionalizados de cambio climático sobre España a partir de los resultados del IPCC-AR5 (2017) recoge para el periodo 2081-2100 un aumento de la temperatura máxima que podría variar entre los 2º C-6º C en función de los escenarios más o menos emisivos; y en cuanto a las precipitaciones se espera una disminución con valores relativos a los del periodo de referencia (1961-1990) entre un 16% y un 4%. En definitiva, los datos de 2022 que hoy representan una anomalía y nos generan alarma, a medida que avance el siglo podrían convertirse en valores normales.



Los datos de la estación meteorológica de Amurrio muestran un aumento de las temperaturas desde que se tienen registros como se observa en el gráfico mostrado anteriormente, y un descenso de las precipitaciones que queda patente en el incremento de años que llueve por debajo de los mil litros.

Quejigos secos en la cumbre del Eskoritas

Nos queda la esperanza de que alcancemos los objetivos del Acuerdo de París por el cual 196 países se comprometieron en 2015 a tomar medidas para que la temperatura del planeta no superase 1’5ºC respecto a los niveles preindustriales (periodo que va de 1850 a 1900), de ninguna manera alcanzar los 2ºC, y de esta manera evitar los impactos más negativos del cambio climático. Pero ya sabemos que el papel lo aguanta todo, aunque sea un acuerdo jurídicamente vinculante. En el mes de marzo el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) nos ha exhortado una vez más para que tomemos medidas con carácter de urgencia. Seguimos aportando ingentes cantidades de gases de efecto invernadero a la atmósfera y a día de hoy estamos rozando ya 1’2ºC respecto a los niveles preindustriales según la Organización de Meteorología Mundial.

La Unión Europea ya está tomando medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, incidiendo en aquellos sectores que más están contribuyendo a ello como la producción energética o el transporte: el Parlamento Europeo ha aprobado que en 2030 el 42,5% del consumo final de energía debe proceder de energías renovables o que en 2035 dejarán de venderse vehículos diésel y gasolina.

Pinos silvestres secos en el entorno de Etxaurren


Desde  luego que todas estas políticas son encomiables, pero no nos dejemos deslumbrar por términos como transición energética, era pospetróleo, sostenibilidad, energía verde o descarbonización. Detrás de ellos se esconden retos no menos urgentes a los que tenemos que hacer frente igualmente ¿de dónde extraeremos el mineral para satisfacer la demanda creciente de recursos de ocho mil millones de personas?¿nos estamos acercando a Thanatia, es decir, a un mundo donde se han extraído, procesado y utilizado todos los depósitos minerales?¿cuándo dejaremos de externalizar los países ricos los impactos medio ambientales a los países menos desarrollados?...


lunes, 22 de agosto de 2022

La mariposa apolo y el cambio climático

 

Parnassius apollo en la Sierra Salvada. Foto Gustavo Abascal

El pasado verano Euskalmet, la Agencia Vasca de Meteorología, publicó un informe meteorológico en el que indicaba que las temperaturas medias del mes de julio de 2021 habían sido frías, hasta el punto de haber sido el cuarto julio más frío desde que comenzó el siglo. Entonces nos preguntábamos ¿quizá el cambio climático fuese más despacio de lo que pronosticaban los científicos? ¿quizá la situación no fuera tan preocupante? Los datos sobre las temperaturas del pasado mes de julio aportados por Euskalmet son muy diferente a los del año pasado: julio ha sido uno de los meses más cálidos y secos de los últimos 50 años. Se destacaba el episodio histórico de la ola de calor sucedida entre los días 11 y 18 de julio y los valores máximos recogidos en algunos lugares como la estación de Gardea donde se alcanzaron los 43’6º C, Saratxo con 42’9º C o Orozko con 42’4º C.

A los pies del Babio y Santa Cruz de Burubio


En una entrada de este blog publicada en 2016 ya habíamos dado cuenta del aumento generalizado de las temperaturas registrado también en nuestra comarca a partir de los datos proporcionados por la estación meteorológica de Amurrio, perteneciente a Aemet (Agencia Estatal de Meteorología) y en funcionamiento desde 1955. Además, señalábamos las temperaturas máximas que se alcanzaron el 10 de agosto de 2012 cuando los termómetros de las estaciones de Euskalmet en Saratxo y Gardea marcaron 44’2º C y 44’7º C respectivamente.

Río Nervión a su paso por Lamuera. Orduña.

Las altas temperaturas unidas a la fuerte sequía (pues la primavera ya fue seca y en lo que llevamos de verano a apenas ha llovido unos pocos litros) nos han dejado un paisaje seco: la falta de agua se hace patente en pozos, arroyos y ríos, pero también en una campiña de prados amarillentos que recuerdan a campos de cereal cosechados.Las cumbres de montes como Eskoritas o Pico Asnos donde el suelo es poco profundo muestran una hilera de quejigos marrones, y aquí y allá encontramos pies de serbales y majuelos de hojas amarillas y marchitas. Esta situación solía darse en años con veranos secos e inicio del otoño sin precipitaciones, sin embargo este año se ha adelantado al menos dos meses.

Pozo del Portillo de las Escalerillas. Sierra Salvada.

En julio también se puede contemplar en la Sierra Salvada una mariposa diurna muy especial: Parnassius apollo. Se encuentra distribuida por todo Eurasia y en nuestro territorio está considerada como una especie relicta de la época de las glaciaciones, es decir, ha sido capaz de sobrevivir al aumento de las temperaturas con la llegada del Holoceno ocupando áreas montañosas donde las temperaturas son más bajas y se producen precipitaciones en forma de nieve. Sería muy similar al caso del lagópodo alpino o del mochuelo boreal que habitan en Pirineos, por poner ejemplos cercanos. Esta es la razón por la que sus poblaciones se encuentren en muchas ocasiones alejadas y aisladas geográficamente.

Mariposa apolo en la Sierra Salvada

Como podemos imaginar, a medida que vayan aumentando las temperaturas a lo largo del siglo como consecuencia del calentamiento global los requerimientos climáticos de esta especie le obligarán a desplazarse a mayores altitudes, provocando consecuentemente la extinción en aquellas montañas de poca elevación. Es lo que ha podido ocurrir ya en Valderejo o Izki donde se ha dejado de observar a la Apollo, aunque en este caso la recolección de especímenes puede que haya sido también un factor determinante.

Mapa de la distribución de la mariposa apolo extraído de Mariposas diurnas de Euskadi de Yeray Monasterio y Ruth Escobés.

A lo largo del presente siglo seguiremos emitiendo a la atmósfera ingentes cantidades de gases de efecto invernadero que incrementarán aún más la temperatura del planeta así que la pregunta que nos surge lógicamente es la del momento en el que se produzca la extinción de esta mariposa en las sierras de Salvada, Gibijo o Arkamo. Sirva esta entrada como testimonio de la presencia de Parnassius apollo en nuestra comarca.

Pozo Kobata. Sierra Salvada.

El mes de julio no sólo ha sido sofocante en cuanto a las temperaturas sino a unos medios de comunicación que ocupaban titulares, portadas, programas, minutos y más minutos en radio y televisión sobre las altas temperaturas y las graves consecuencias derivadas de ello como los grandes incendios, las muertes por golpes de calor o los problemas que atraviesa la ganadería y la agricultura por la falta de agua. Esta sensación que nos ofrecen los medios de comunicación de estar viviendo una situación límite o los mensajes que emite la comunidad científica sobre los problemas a los que tendremos que enfrentarnos en el futuro contrastan enormemente con la tranquilidad del ciudadano que se adapta rápidamente desplazándose kilómetros para sumergirse en una playa o piscina o comprando equipos de aire acondicionado que aporten más gases de efecto invernadero a la atmósfera.

Quejigos en la parte superior del pico Eskoritas

La mariposa apolo y las aves ligadas a la montaña como el acentor alpino no podrán adaptarse con esta rapidez, desaparecerán de nuestras montañas en sólo unos años.